El alto nivel de competitividad de las empresas y los nuevos modelos de negocio como el comercio online han obligado a las compañías a desarrollar políticas de servicio en las que la ventaja competitiva se centra en el diseño, gestión y funcionamiento de sus cadenas logísticas y en la flexibilidad y agilidad de las mismas satisfacer las necesidades del cliente de forma sostenible social, económica y medioambientalmente.
La regulación en materia medioambiental presiona a las compañías a gestionar las externalidades que provocan sus operaciones y productos sobre todo al ser desechados el finalizar su vida útil.
La logística inversa es la clave para poder hacer frente tanto a las exigencias de los clientes como a la regulación medioambiental y además de ser una oportunidad estratégica para las empresas que reinventen sus procesos y sean capaces de recuperar el valor de los productos, materiales de empaque e información en el flujo inverso de la cadena de suministro.
Entre las ventajas de la logística inversa encontramos la reducción de materiales potenciando su reutilización y reciclaje, desarrollo de mercados secundarios y mejoras en la imagen empresarial.
La economía circular toma como base la logística inversa, la cual y es más compleja que la logística directa por la dificultad para calcular costes, las múltiples etapas donde entran los productos, la deslocalización de los mismos y la dificultad para medir el rendimiento y obtener beneficios de forma directa. En este sector se abren oportunidades para Operadores Logísticos especializados en distribución, para el aprovechamiento de este Know How.
Les comparto el siguiente link relativo al tema de la economía circular y el grado de implantación en España en diferentes sectores:
En el siguiente vídeo se explica en el minuto 3:30 una definición de logística inversa y en el 5:30 se nota los diferentes etapas en que un producto o material puede ser movido en flujo inverso y la complejidad que supone respecto a la logística directa.