Un piloto de Fórmula 1 se encuentra en medio de una carrera, quedan varias vueltas, pero llega un momento inevitable: la parada técnica para hacer reparaciones y cambios de neumáticos. El piloto entra a la línea de pits y un equipo de trabajadores se lanza al vehículo, lo levantan, cambian los 4 neumáticos, limpian el visor del casco del piloto, dejan caer los gatos y el vehículo parte a continuar la carrera.
Lo más impresionante de todo esto, sin dejar de mencionar la precisión y coordinación que se requiere, es que llevar a cabo ese proceso requiere menos tiempo de lo que toma leer esta oración.
Saco a relucir este proceso, porque en cada parada técnica cada milisegundo es importante, al punto de que uno extra puede llegar a significar la victoria o derrota del equipo.
Como en las carreras de Fórmula 1, en el mundo competitivo moderno, algo muy parecido pasa con las cadenas de suministro, donde la flexibilidad, que según De Groote (1994) considera que es la capacidad de un sistema para enfrentarse con la volatilidad de necesidades de su entorno; y para Upton (1994), ésta refleja la capacidad de un sistema para adaptarse y responder de forma adecuada a los cambios internos y externos con el menor coste, tiempo, esfuerzo y/o pérdida de resultados posible; es un factor indispensable para obtener ventajas competitivas y ganar mayor cuota de mercado; mientras menos tiempo le tome a nuestra cadena de suministro adaptarse a las necesidades de los clientes, mayor será el éxito que tendrá nuestra empresa. La transformación de la cadena de suministro es ineludible. La rapidez, precisión y eficiencia del servicio serán determinantes para competir.
“En el futuro, la competencia no se dará de empresa a empresa; sino, más bien, de cadena de suministro a cadena de suministro”, es una conocida frase de Michael E. Porter. Es evidente que este autor estaba en lo correcto, puesto que para las empresas poder sobrevivir en entornos tan agresivos, ya no es suficiente con hacer simples mejoras de sus operaciones y la integración de sus funciones internas, tienen que ir más allá de sus puertas y es inminentemente necesario iniciar relaciones de intercambio de información, materiales y recursos con los proveedores, distribuidores y clientes; además, se vuelve cada vez mas imprescindible contar con información en tiempo real para realizar una labor eficiente. Cada vez, esta red se vuelve más compleja y el uso de tecnologías innovadoras es la solución más viable para una correcta gestión de la misma, de forma que se beneficien conjuntamente todos los actores.
Para seguir ampliando en el tema les dejo el siguiente link: Tres tendencias en la cadena de suministro a tener en cuenta en 2018
Logística de Aprovisionamiento y Distribución 