El aumento de la población es una realidad abrumadora a tratar por todos los gobiernos. Sin embargo, ¿cómo se puede hacer? Se vuelve a la política de hijo único de China con las consecuencias de la pirámide de población invertida en el futuro. No es una posibilidad contemplada por los gobiernos ya que las prestaciones sociales y pensiones no se podrían cubrir por los más jóvenes por la carencia de estos. Así pues, los dirigentes globales están apostando por las economías circulares y sacar el mayor partido a los recursos primarios.
Es aquí y ahora donde se trabaja para mitigar los desperdicios y uno de los que más preocupa es el alimentario. La Ciudad Condal ha aprobado recientemente una propuesta de ley para sancionar a bares y restaurantes que no faciliten un táper a sus clientes para llevarse las sobras. Es una ley que quiere sancionar a todos los agentes de la cadena alimentaria. Todos ellos sean partícipes que el despilfarro no es una opción.
Pero, si miramos atrás en el tiempo, tampoco hace falta irse en décadas, hubo gente que ya apostó por la economía colaborativa y la economía circular. Entre ellos destacan Vintedo Too Good To Go. Este último, se basa en la venta directamente a particulares por un tercio de lo que vale de packs sorpresas de bares, restaurantes e, incluso, supermercados o pequeñas tiendas. Una app que apostó por el desperdicio como su modelo de negocio y acertó. Además, su intentó es ayudar a dar a conocer los productos de estos como lo conocido como cross-selling o venta cruzada. Aumentar las ventas de sus colaboradores mediante se oferta otro.
Logística de Aprovisionamiento y Distribución 